El trabajador presenta un reclamo ante la unidad de adjudicación de reclamos salariales de DLSE, detallando cuánto cree que se le debe en salarios no pagados.

La Oficina del Comisionado Laboral lleva a cabo una conferencia de conciliación con el trabajador y el empleador. Por ley, esto debe ocurrir dentro de los 30 días.

Si el reclamo no se resuelve, el caso se programa para una audiencia, que debe tener lugar dentro de los 120 días posteriores al reclamo. Un comisionado laboral adjunto preside y los trabajadores y los empleadores pueden traer documentos y testigos para testificar.

El comisionado toma una decisión. El empleador puede apelar la decisión ante los tribunales.

Si el empleador no apela pero no paga los salarios evaluados, la decisión se remite a los tribunales como sentencia. La División puede hacer cumplir la sentencia o el trabajador puede intentar cobrarla por sí mismo.